«Para que los cambios que propone el gobierno del Pacto Histórico puedan concretarse, considero que el gobierno debe desarrollar estrategias efectivas de comunicación a través de medios alternativos a los medios opositores y estar dispuesto al diálogo con opositores sinceros para mejorar los nuevos sistemas propuestos sin sacrificar su esencia».
Cambios en los sistemas sociales y sociotécnicos, especialmente en los sociales, plantean desafíos significativos. Este proceso a menudo se ve obstaculizado por actores influyentes con recursos considerables, quienes resisten estas transformaciones debido a la percepción de que podrían sufrir pérdidas en los beneficios que disfrutan en el sistema anterior. Estos actores privilegiados no solo poseen poder económico, sino también una influencia política considerable que les permite oponerse a iniciativas de cambio a través de canales institucionales.
Es importante señalar que, en ocasiones, estos actores pueden pasar por alto o incluso socavar los principios democráticos al recurrir a tácticas deshonestas para ocultar las verdaderas razones detrás de su resistencia al cambio. En lugar de contribuir al avance y la evolución de la sociedad, su enfoque se centra en mantener sus propios intereses y privilegios, lo que puede tener un impacto negativo en el progreso hacia sistemas más justos y equitativos.
Además, en el proceso de promover el cambio en sistemas sociales, es fundamental reconocer que algunos de estos actores privilegiados no solo tienen poder económico y político, sino que también son propietarios de medios de comunicación masiva. Y, que utilizan estos medios para difundir desinformación, desacreditar iniciativas de cambio y construir narrativas basadas en falsedades con el fin de influir en la opinión pública.
Esta estrategia de manipulación mediática puede tener un impacto significativo en la percepción pública y, en última instancia, en la voluntad de las personas para apoyar el cambio. La capacidad de estos actores para construir narrativas engañosas puede intimidar a quienes están a favor del cambio, creando un clima de desconfianza y confusión.
En este contexto, pienso que quienes promueven el cambio deben contrarrestar narrativas perversas y falaces, con información verificable y pedagogía sobre las propuestas de reforma; junto con acciones transparentes y herramientas de vigilancia para preservar la integridad de los procesos de cambio y garantizar que la sociedad pueda tomar decisiones informadas sobre su futuro.
Para superar estos desafíos, considero esencial la transparencia en las acciones de Gobierno, un diálogo social amplio, constructor de acuerdos, con todos los actores, como lo ha expresado el presidente, y la participación ciudadana efectiva en los procesos de cambio social; de modo que las decisiones se tomen de manera más informada y democrática, teniendo en cuenta el bienestar colectivo en lugar de intereses individuales mezquinos.
Los desafíos frente a las iniciativas de cambio del actual Gobierno son enormes y la ruta está plagada de obstáculos. Las reformas propuestas por el gobierno del Pacto Histórico enfrentan una fuerte oposición bien orquestada, coordinada con acciones en todos los frentes, como una verdadera guerra con toda la artillería, en todos espacios de acción política.
Desde el momento en que Petro ganó la presidencia, la derecha ha desplegado todo su arsenal de oposición en medios de información y en el Congreso; especialmente en contra de las reformas en los sistemas de salud y pensiones, donde las grandes corporaciones económicas tienen negocios en EPS y en administradoras de fondos privados de pensiones. Ha utilizado estrategias de desinformación y fake news a través de los medios de comunicación controlados por los grandes grupos económicos. También ha empleado la guerra sucia con el activismo de opositores y congresistas influyentes en las redes sociales. Acompañado de un trabajo de oposición coordinado por congresistas que defienden intereses de poderosos grupos económicos que les financiaron las campañas. Solo dos de estos grupos económicos aportaron cerca de 23 000 millones de pesos en las elecciones de 2022, según informes presentados al Consejo Nacional Electoral.
Para que los cambios que propone el gobierno del Pacto Histórico puedan concretarse, considero que el Gobierno debe desarrollar estrategias efectivas de comunicación a través de medios alternativos a los medios opositores y estar dispuesto al diálogo con opositores sinceros para mejorar los nuevos sistemas propuestos sin sacrificar su esencia. También los ciudadanos tenemos la responsabilidad de respaldar las iniciativas de cambio que benefician a la mayoría del pueblo colombiano, apoyados en información veraz obtenida a través de diversas fuentes confiables. Y, que debemos ser rigurosos al analizar la información relevante y buscar formas de verificación para tomar decisiones de manera autónoma.
