Durante una disertación en el V Foro Internacional “Rusia e Iberoamérica en el mundo globalizante: Historia y perspectivas”, la presidenta del Consejo Europeo de las Investigaciones Sociales sobre América Latina -CEISAL- María Clara Medina, destacó que la pandemia de la Covid-19 visibilizó aún más las Violencia Basadas en Género, y las ha mostrado como una problemática que cada día se hace aún más vigente.
En la presentación realizada en San Petersburgo (Rusia) sobre “Derechos Humanos y visibilidad de género en la agenda social de integración latinoamericana durante y después de la pandemia”, la profesora de la Universidad de Gotemburgo (Suecia) señaló que en este sentido hay tres áreas críticas a analizar: la crisis de la violencia machista, la crisis de los cuidados y la precariedad laboral.
Médina citó datos de un informe del 2018, realizado por la Organización de Naciones Unidas -ONU-, donde se señaló que Nuestra América es la zona más peligrosa para las mujeres fuera de las zonas de guerra, y que las violencia basadas en género son una constante en el territorio. Además, subrayó que la violencia patriarcal tiene una pirámide en cuya base está el lenguaje sexista y el abuso verbal y en la cima el feminicidio.
Sobre la precariedad laboral destacó que las mujeres han estado en la primera línea de combate a la Covid-19, pues en la región el 70% de las y los trabajadores de la salud son mujeres. Por lo tanto, han estado más expuestas al virus y sus consecuencias.
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Según el informe de la ONU Mujeres/Unicef, también se incrementó la violencia contra las mujeres y las niñas durante los meses de cuarentena, y recalcó el sobrecargo de los trabajos de cuidado al que se han sometido las mujeres con muchas horas no remuneradas, pues “se ha triplicado el tiempo dedicado a la atención de la familia, hijos, esposos y padres”.
