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El presidente Nicolás Maduro develó una placa y un monumento conmemorativo de los 30 años de la rebelión del 4 de febrero. 

 

El presidente recordó que los hechos del 4 de febrero de 1992 fue una respuesta del pueblo ante las medidas neoliberales impuestas.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, inauguró este jueves la Plaza de la Rebelión Antiimperialista en la ciudad de Caracas (capital), para fortalecer la memoria histórica de la población.

El mandatario aseguró que “este monumento combina lo real y lo maravilloso”, al tiempo que resaltó la belleza de la construcción y la labor de las personas que trabajaron en su realización.

En la víspera de cumplirse el 30 aniversario de la gesta liderada por el comandante Hugo Chávez, el jefe de Estado aseveró que "aquella madrugada del 4 de febrero de 1992, Venezuela vivió el estremecimiento político y espiritual más grande que se haya conocido desde la época de la Independencia".

Asimismo, destacó la labor del comandante Chávez en los albores de 1992, y el papel fundamental jugado por este en una acción que marcó un antes y un después en la historia de esta nación suramericana y que terminó siendo la semilla de la Revolución Bolivariana.

“Aquella juventud entendió que era en ese momento o no era nunca. Aquella madrugada no solo Venezuela sintió el estremecimiento de un régimen político corrompido y entregado al imperialismo”, resaltó.

El presidente Maduro recordó que aquel levantamiento fue una respuesta del pueblo ante las medidas impuestas por el entonces mandatario Carlos Andrés Pérez, por lo que demostró que Venezuela estaba comenzando a cansarse del sistema neoliberal y buscaba cambios radicales.

Por su parte, la alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, resaltó que "tenemos que construir una ruta histórica para mostrar las huellas de la batalla que ha dado nuestra patria durante 500 años, para mostrar al mundo de dónde venimos, nuestros valores y de qué fuerza espiritual estamos constituidos 

Para la inauguración se realizó una gala cultural con la actuación de la Orquesta Filarmónica Municipal, los músicos Aquiles Rengifo, William Alvarado, y la interpretación de la obra teatral titulada Aguacero.