se cumplen 121 años del fallecimiento del político, periodista, filósofo y escritor cubano José Julian Martí Pérez a los 42 años de edad, destacado precursor del modernismo literario hispanoamericano y uno de los principales líderes de la independencia de su país.
Nacido en el seno de una familia española con pocos recursos económicos, a la edad de doce años José Martí empezó a estudiar en el colegio municipal que dirigía el poeta Rafael María de Mendive, quien se fijó en las cualidades intelectuales del muchacho y decidió dedicarse personalmente a su educación.
El joven Martí pronto se sintió atraído por las ideas revolucionarias de muchos cubanos, y tras el inicio de la Guerra de los Diez Años y el encarcelamiento de su mentor, inició su actividad revolucionaria: publicó la gacetilla El Diablo Cojuelo, y poco después una revista, La Patria Libre, que contenía su poema dramático Abdala.
A los diecisiete años, José Martí fue condenado a seis años de cárcel por su pertenencia a grupos independentistas; realizó trabajos forzados en el penal hasta que su mal estado de salud le valió el indulto.
Fue deportado a España y en este país publicó su primera obra de importancia, el drama La adúltera. Inició en Madrid estudios de derecho y se licenció en derecho y filosofía y letras por la Universidad de Zaragoza.
Durante sus años en España, surgió en él un profundo afecto por el país, aunque nunca perdonó su política colonial. En su obra La República Española ante la Revolución Cubana, reclamaba a la metrópoli que hiciera un acto de contrición y reconociese los errores cometidos en Cuba. Tras viajar durante tres años por Europa y América, José Martí acabó por instalarse en México.
En México, contrajo matrimonio con la cubana Carmen Sayes Bazán y, poco después, gracias a la paz de Zanjón, que daba por concluida la Guerra de los Diez Años (1868-1878), se trasladó a Cuba. Deportado de nuevo por las autoridades cubanas, temerosas ante su pasado revolucionario, se afincó en Nueva York y se dedicó por completo a la actividad política y literaria.
Desde su residencia en el exilio, José Martí se afanó en la organización de un nuevo proceso revolucionario en Cuba, y en 1892 fundó el Partido Revolucionario Cubano y la revista Patria. Se convirtió entonces en el máximo adalid de la lucha por la independencia de su país.
Dos años más tarde, tras entrevistarse con el generalísimo Máximo Gómez, logró poner en marcha un proceso de independencia. Pese al embargo de sus barcos por parte de las autoridades estadounidenses, pudo partir al frente de un pequeño contingente hacia Cuba.
“Ese binomio de Bolívar y Martí como forma de levantar la emoción y el orgullo de los Latinoamericanos de nuestro trabajo para la cual también necesitamos estrechar nexos con los pueblos de nuestra américa es un trabajo organizativo, así recordaba el Comandante Supremo de la Revolución, Hugo Chávez, a José Martí.
Para el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, la lucha de Martí ha permitido el despertar de nuevos líderes de Latinoamérica y el Caribe, que continúan el mismo legado independentista. ” Que los caminos que nos han hecho los libertadores nos han traído hasta acá y que gracias a los hijos de Bolívar y Martí y sus dos exponentes principales Fidel y Hugo Chávez, quienes lograron unir el hilo histórico de Bolívar y de Martí, logrando colocar en el plano verdadero, la hermandad”.
El máximo líder cubano antimperialista, muere en la batalla de Dos Ríos el 19 de mayo de 1895 en la ciudad de La Habana.
Diversos actos en su honor se efectuarán en toda América Latina. México le ha dedicado una semana a su pensamiento y obra.