Los poderosos no se inmutan con las salpicaduras de la sangre derramada, La Tiranía se hace sorda al grito de dolor de los empobrecidos y las gentes de bien no tienen hambre, ni sed de Justicia… !Pero si hoy la vieja Colombia esta sembrando nuestras hijas e hijos… es porque mañana una Nueva Colombia tendrá Cosecha!. Matiz Gustavo