Intervinieron los jefes de delegación de ambas partes y el acto fue clausurado por el presidente colombiano Gustavo Petro.
El gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) comenzaron oficialmente este jueves el cese al fuego bilateral por 180 días como parte de la política de Paz Total impulsada por el Ejecutivo del presidente Gustavo Petro.
Las delegaciones negociadoras intervinieron esta jornada en el acto de instalación del Comité Nacional de Participación en los acuerdos en Corferias, Bogotá, donde se concentraron alrededor de 2.000 personas.
En el evento, encabezado por el jefe de Estado colombiano, fueron anunciadas un conjunto de iniciativas para avanzar en el proceso de una paz definitiva.
A su vez, fueron presentados los 81 delegados del Comité encargado de llevar a las negociaciones los diferentes aportes y solicitudes de la sociedad civil para erradicar la violencia.
En este sentido, la estructura se encuentra conformada por miembros de organizaciones sociales, gremiales, movimientos de víctimas, empresariales, entre otros sectores.
“El objetivo de la participación es construir una agenda de transformaciones que conlleve a un gran acuerdo nacional para superar el conflicto armado y social”, señaló la delegada del Gobierno en la mesa negociadora, Nigeria Rentería.
Por su parte, la delegada del ELN, Consuelo Tapias, destacó la necesidad de ser “eficaces” y “concretar hechos de paz” en pos de “parar las amenazas y muertes de líderes en los territorios”.
El titular de la delegación negociadora del ELN, Pablo Beltrán, afirmó durante el acto que el trabajo que tiene la participación de la sociedad “tiene un alma, una esencia: construir una visión común de paz”.
Saludó la presencia de cientos de pobladores de regiones apartadas del país, las que históricamente más han padecido la guerra.
“Me conmueve ver personas de todos los rincones del país, que estuvieron más de un día en un bus para estar acá”, dijo Beltrán.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, cuyo país se encuentra en condición de garante, expresó la “esperanza” de la entrada en vigor del cese al fuego acordado el pasado 9 de junio en La Habana.
Presidente Petro: hay que abrir ventanas y puertas hacia el futuro
Al hacer uso de la palabra, el presidente saludó a ambas partes de la mesa de diálogos que se encuentra funcionando entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
"Guerras y violencias heredadas. Una historia que tiene que resolverse. De una fase a otra tenemos que pasar. Hay que cerrar una puerta sin olvido, y abrir ventanas y puertas hacia el futuro, hacia la libertad", expresó el mandatario.
Al respecto, lamentó cómo Colombia ha pasado de violencia en violencia y aseguró que es la esperanza el único camino para vencer el miedo.
El mandatario criticó el orden mundial imperante y el consumismo, y los señaló como los principales causantes del cambio climático y sus efectos nocivos.
"Están ocurriendo cambios en el mundo. Ya África no es como antaño, África hoy es rebelde. América Latina no es como antaño, América Latina es rebelde. Hay grandes transformaciones económicas: los poderes de hace 40 años no son los poderes de hoy", expresó el líder.
Gustavo Petro llamó a trabajar por buscar la igualdad social, para que todos sean iguales antes la sociedad y vivir en paz, en comunidad y en diversidad.
"Dentro del marco de la Constitución actual podemos desarrollar entonces un nuevo acuerdo nacional. ¿Está dispuesto el Congreso de la República a asumir la responsabilidad histórica de volver norma los acuerdos de un acuerdo nacional?", expresó.
Asimismo, cuestionó si las fuerzas políticas nacionales podrán asumir la responsabilidad conjunta de forjar el acuerdo nacional de Colombia para dejar la guerra y la violencia.
"No estoy aquí, como antaño, planteando una división de la sociedad alrededor de este tema. No se trata de votar por una bandera o por otra, se trata de acordar entre todos", recalcó.
En ese sentido, expresó que la idea es que los partidos de oposición y los de Gobierno lleguen a soluciones comunes, a problemáticas sociales concretas.
"Si la tierra es un acuerdo, entonces cumplamos el primer punto del acuerdo Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y el Gobierno. Tres millones de hectáreas de tierras fértiles para el pueblo", aseveró el dignatario.
