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El ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, reiteró este domingo que las investigaciones sobre los hechos ocurridos este sábado durante el acto por el 81 aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) apuntan a que se trata de un delito de terrorismo y magnicidio en grado de frustración y señaló que están plenamente identificados los autores materiales e intelectuales.

Informó que hasta el momento se encuentran detenidos seis terroristas y sicarios, hay varios vehículos incautados, se han practicado varios allanamientos a hoteles en la capital del país donde se ha recabado importante evidencia de interés criminalístico, evidencia

fílmica de presuntos colaboradores del hecho, y están plenamente identificados los autores materiales e intelectuales dentro y fuera del país, por lo que no se descartan en las próximas horas nuevas detenciones, dijo Reverol en declaraciones transmitidas por VTV.

Detalló que uno de los detenidos tenía orden de captura por el asalto al Fuerte Paramacay, y otro había sido detenido en 2014 por hechos de violencia y se le había otorgado un beneficio procesal.

“Las investigaciones han evidenciado se trata de un delito de terrorismo y magnicidio en grado de frustración. Lo que deja claro que estos terroristas y sicarios han pasado a un nivel superior incrementando el espiral de violencia”,

El ministro indicó que una vez desplegados los órganos de inteligencia y los anillos de seguridad se pudo evidenciar que desde calles adyacentes al evento fueron despegados dos aeronaves tripuladas a distancia, cada con carga aproximada de 1 kg de explosivo denominado C4, capaz de hacer daño efectivo a un radio aproximado de 50 metros.

Agregó que este tipo de aeronaves piloteadas a distancia son diseñadas para trabajos industriales que pueden soportar grandes cargas como la de una cámara de cine o un kit complejo de grabación. Específicamente, se trató de dos aeronaves modelo DJIM600.

“Una de las ellas sobrevoló la tribuna presidencial con el fin de activar a distancia el explosivo, pero gracias a las técnicas especiales de la Guardia de Honor Presidencial y a la colocación de equipos inhibidores se logró desorientar el drone activándose fuera del perímetro planificado por los “sicarios y terroristas de este hecho. El otro drone perdió el control en las aproximaciones del evento y cayó en un edificio cercano denominado Don Eduardo, cerca de la avenida Bolívar, detonando a la altura del piso 1 del mencionado edificio”, explicó.

Señaló que no solo fue un acto de delito de magnicidio sino también un homicidio en grado de frustración contra el pueblo venezolano que asistió al acto y representantes de los poderes y cuerpo diplomático, el Alto Mando Militar, y ministros. Lamentó también que siete funcionarios de la GNB se encuentran lesionados, tres de ellos con pronóstico reservado.

Agradeció las expresiones de solidaridad recibidas para el Presidente y el pueblo de Venezuela y felicitó a los órganos de inteligencia y de seguridad por su actuación de este sábado.