La compañía energética española Cepsa ha anunciado este viernes que los aviones del aeropuerto de Sevilla usarán un prometedor combustible producido a partir de huesos de aceitunas, en un importante paso hacia la descarbonización del transporte aéreo y la transformación del sector energético.
"Esta iniciativa evitará la emisión de más de 200 toneladas de CO2, el equivalente a la plantación de más de 2.500 árboles", asegura la empresa, al argumentar que la nueva propuesta podría revolucionar la industria energética y la movilidad sostenible en España y Portugal.
El nuevo carburante, llamado combustible sostenible para la aviación (SAF, por sus siglas en inglés), fue producido en el Parque Energético La Rábida, en la provincia andaluza de Huelva, y ha sido creado a partir de huesos de aceituna y otros residuos vegetales del sector de la oliva en España. El SAF será usado en 220 vuelos de las compañías Air Europa, Air Nostrum, Iberia Express, Ryanair, Vueling y Wizz Air, que partirán desde el aeropuerto sevillano la próxima semana.
Con la implementación de este combustible verde, desarrollado en el marco de la estrategia de movilidad sostenible 'Positive Motion', la compañía española pretende reducir sus emisiones de CO2 en un 55 % para el 2030 y alcanzar el 0 % en 2050. Así, Cepsa posicionaría a España como pionero en la lucha contra el cambio climático.
"Sevilla es hoy de nuevo referencia en innovación, investigación y lucha contra el cambio climático", manifestó el alcalde de la capital andaluza, Antonio Muñoz. "Será la primera vez que un aeropuerto del sur de Europa use esta tecnología, algo que sin duda vuelve a posicionar a nivel internacional a Sevilla", agregó.
El nuevo biocombustible podría además ser parte de la solución a la actual crisis energética que está sufriendo Europa debido a los fuertes incrementos en los precios de los hidrocarburos tras las sanciones impuestas contra Rusia por el conflicto en Ucrania.