El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ofrece “el pleno apoyo y solidaridad” de su país a Rusia para contrarrestar las prácticas arbitrarias de los imperialistas.
El liderazgo norcoreano ha felicitado este lunes, mediante un mensaje, el Día de Rusia (el 12 de junio) —que marca la Declaración de la Soberanía Nacional de la Federación de Rusia—, y ha reafirmado el respaldo de su país a la lucha del pueblo ruso para “preservar sus derechos soberanos”.
El pueblo norcoreano extiende su “pleno apoyo y solidaridad al pueblo ruso en su lucha por implementar la sagrada causa de preservar los derechos soberanos, el desarrollo y los intereses de su país contra las prácticas arbitrarias de los imperialistas”, reza el mensaje, divulgado por la agencia oficial norcoreana KCNA.
Kim ha ensalzado “la correcta dirección y guía [del presidente ruso, Vladimir Putin] para contener las crecientes amenazas de fuerzas hostiles”, en una referencia implícita al conflicto entre Rusia y Ucrania, en el que los países occidentales intervienen indirectamente con el masivo envío de armas a Kiev.
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Ha reiterado una vez más la voluntad de Pyongyang de “trabajar por una cooperación estratégica más estrecha entre Corea y Rusia”.
Corea del Norte ha abogado por reforzar sus cooperaciones estratégicas con Rusia para contrarrestar a Estados Unidos y sus aliados, una amenaza común, según Pyongyang.
El país asiático ha achacado el conflicto en Ucrania a la “obstinación y arbitrariedad” política de Estados Unidos y a su política “hegemónica”, y ha denunciado que Washington “ha ignorado las demandas legítimas de Rusia de respeto por su seguridad”, ante la expansión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Europa del Este.
En agosto, varios medios de comunicación afirmaron que Corea del Norte había ofrecido a Rusia enviar 100 000 voluntarios para combatir junto al Ejército ruso contra las fuerzas ucranianas.
No obstante, Moscú ha asegurado que las capacidades de combate de los soldados rusos junto con las tropas de las repúblicas populares de Lugansk y Donetsk (en el Donbás) —reconocidas por Rusia— son “suficientes” para lograr los objetivos de la operación de Ucrania.
