Aviso

Equipo Jurídico Pueblos

Sin tener certeza alguna de las razones del desabastecimiento, la población privada de la libertad en este centro de reclusión, lleva tres días sin servicio de agua.

Las implicaciones para salud y salubridad del establecimiento, son nefastas. Los sanitarios se encuentran literalmente rebosantes de materia fecal, los detenidos no cuentan ahora con líquido suficiente para su aseo personal, menos aún para el lavado de utensilios de cocina y ropa.

 

Las condiciones de reclusión se tornan absolutamente inhumanas y degradantes.

 

Por si fuera poco, los logros ganados en la lucha, sobre régimen de visitas y reglamento, aún no se implementan.

 

Las personas privadas de la libertad en el establecimiento penitenciario y carcelario de Valledupar, requieren de la solidaridad e intervención urgente de las organizaciones de familiares, de derechos humanos, además de las autoridades de control, gobierno y penitenciarias, para que se ponga fin inmediato al sistemático y continuado estado de degradación al que se encuentra sometida.

 

29 de abril de 2016

 

Movimiento Nacional Carcelario