Habría servido para que los delegados de la Registraduría reportaran en tiempo real las novedades desde cada puesto de votación, pero los desarrolladores no tuvieron tiempo de subirla a las tiendas de aplicaciones.
Una aplicación móvil que iba a ser utilizada por los 11.300 delegados de la Registraduría para reportar, en tiempo real, las novedades que se presentaran en cada puesto de votación, durante las elecciones del pasado 13 de marzo, nunca funcionó. De eso se percataron los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA). Un ingeniero de sistemas de la Registraduría reconoció que los desarrolladores no habían alcanzado a subirla a las principales tiendas de aplicaciones: Google Play y Apple Store. A los delegados no les quedó más remedio que reportar las novedades de la manera tradicional, es decir, llenando formularios a mano para transmitirlas por teléfono. Lo grave del asunto es que por esa aplicación la Registraduría pagó 3.300 millones de pesos.