El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, enfatizó este domingo que las manifestaciones y protestas que se están levantando en Chile — y en otros países del continente — es responsabilidad de las medidas neoliberales impuestas por el Fondo Monetario Internacionales (FMI).
"Abajo, en la profundidad de esa sociedad está la desigualdad, la miseria y el abuso acumulado de los años de democracia donde se mantuvo el modelo represivo de Augusto- Pinochet. La derecha dice que es culpa de Maduro, no es culpa de Maduro, es culpa del FMI y del capitalismo salvaje, un modelo empobrecedor y desigual", expresó el jefe de Estado durante el acto de clausura del I Congreso Internacional de las Comunas.
El Mandatario Nacional enfatizó que las manifestaciones de Chile — que registra más de 300 detenidos y más de 160 heridos — se debe al rechazo a las políticas neoliberales que ha regido la nación suramericana y que afecta a las zonas más vulnerables del país, y que solo demuestra la protesta de un pueblo que ha vivido en la desigualdad.
"Los pueblos en Chile le están diciendo a Sebastián Piñera le están diciendo, que ya no son los 30 pesos, son los 30 años. Es la educación, la salud, el gas, el salario, la discriminación. Le está diciendo los pueblos de Chile. Es el modelo excluyente, el neoliberalismo", recalcó Maduro en declaraciones transmitidas por Venezolana de Televisión.
En este sentido, resaltó las masivas movilizaciones que se han realizado en Chile, en rechazo a las medidas neoliberales, así como se levantó la voz para la realización de una Constituyente, que tenga como fin crear una nueva Carta Magna que derogue la Constitución creada por Pinochet y que se mantiene vigente.
"Nadie se atrevió a convocar los cambios que Chile necesitaba y allí están contra la pared (...) Ya el pueblo despertó en Chile. A los pueblos hay que saberlos escuchar", sentenció el mandatario venezolano desde el Hotel Alba Caracas.
Durante una semana se llevaron a cabo fuertes protestas y manifestaciones en varias zonas del país en rechazo a las políticas neoliberales impuesto por Piñera.
Ante las protestas, el Gobierno de Chile decretó en la noche del sábado el primer toque de queda decretado en la nación desde la dictadura militar de Pinochet, que dejó saldo de 77 heridos, entre ellos 15 civiles; dos fallecidos y 716 detenciones.
No obstante, más temprano, se anunció un nuevo toque de queda en la Región Metropolitana de Santiago, que regirá a partir de las siete de la noche (hora local) hasta las seis de la mañana de este lunes.