Aviso

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Las Universidades Públicas Colombianas desde la creación de la Ley 30 de 1992 a la fecha, presenta un déficit acumulado de 12 Billones de pesos (U.S 3.500 millones). La estrategia del presidente Santos y su ministra “estrella” Gina Parody ha sido la de marchitar el sistema universitario implementando medidas que atentan contra la autonomía universitaria, como

prueba de ello el 23 de diciembre de 2104 el Congreso de la República le aprueba a pupitrazo limpio la Ley 1740 (Ley de inspección y vigilancia a la educación superior), como segunda estrategia es el actuar de los Consejos Superiores que tienen en su asiento –entre otros- representantes del presidente y del ministerio de educación, quienes definen y aprueban las políticas de cada una de las universidades, por lo tanto no se entiende cómo en el caso de la Universidad del Tolima se hable de una crisis anunciada de hace más de un año y en ese escenario no haya ocurrido nada y más grave aún, que el culpable de dicha crisis fuese ratificado en su segundo periodo como rector.

 

Es necesario retomar lo planteado por la Junta Directiva de Sintraunicol Universidad del Tolima cuando manifiesta que “para SINTRAUNICOL la razón de la crisis obedece a una inadecuada planeación institucional y unos deficientes controles del gasto que no le permitieron a la dirección de la universidad saber cuánto dinero ingresa y cuánto dinero gasta a tiempo para tomar medidas correctivas que permitan la optimización de los recursos con que dispone la institución”.

 

De igual manera lo señalado por las directivas de ASPU TOLIMA al plantear en su comunicado el 27 de enero de 2106 que “ Es inaceptable el Programa de Saneamiento Fiscal y Financiero presentado por el rector y su cúpula directiva, no solo por haber sido construido a espaldas de la comunidad, sino porque protege las clientelas en el poder que llevaron a la sin salida financiera y pretende descargar la crisis en los hombros de la academia, el bienestar de los estudiantes y estabilidad laboral de los funcionarios de base; además mantiene intacta la “alta burocracia”, por el contrario estimula y fortalece la privatización de la educación superior”.

 

Lo anterior nos permite concluir que el único responsable de la crisis que presenta la Universidad del Tolima ha sido el señor rector JOSÉ HERMAN MUÑOZ ÑUNGO por lo tanto, no aceptamos las propuestas para salir de la crisis presentadas por él ante el Consejo Superior donde plantea acogerse a la Ley 550 o ley de quiebras o entregarla al voraz sector financiero mediante la solicitud de un crédito por valor de $13.000.0000.

 

Queremos dejar claro que la crisis no ha sido responsabilidad de los trabajadores, empleados y docentes, como así lo ha querido dar a entender a la comunidad académica y en general, como tampoco aceptamos que en el recorte presupuestal buscando recursos, resulten afectados los estudiantes reestructurando o eliminando programas de Bienestar Universitario tales como residencias, cafeterías, aumento en matriculas etc. etc.

 

Las 32 subdirectivas de SINTRAUNICOL atendiendo la convocatoria de Junta Nacional a participar en la Gran Jornada Universitaria por la “Educación Superior para el pueblo Colombiano” reunida en la ciudad de Ibagué (UT) exigimos al gobierno nacional: presupuesto suficiente y adecuado para la educación superior y el respeto a la autonomía universitaria ante la intervención del Ministerio de Educación en el marco de la ley de inspección y vigilancia.

 

Hacemos un llamado al sector universitario a estar alertas ante situaciones similares en las que se encuentra la Universidad del Tolima y a las demás que puedan presentarse por la arremetida del gobierno nacional que ha presentado recorte al presupuesto General de la Nación en 6 billones de pesos para el 2016 llamado “austeridad inteligente”.

 

Invitamos a los estudiantes, docentes, trabajadores y empleados a cerrar filas en torno a la defensa de la única Universidad pública del Departamento, protegerla de los intereses del gobierno nacional de acabar lo público, de los intereses externos clientelistas y burocráticos, lo cual no permite que en la UT se brinde una educación con calidad y acaban con la ilusión y un mejor futuro de miles de jóvenes de las clases menos favorecidas y la sociedad en general.

 

COMUNICADO A LA OPINIÓN PUBLICA Y ACADÉMICA EN GENERAL

 

S I N T R A U N I C O L