Los problemas económicos que padecen los colombianos son caldo de cultivo para mantener en auge la descarada actuación de la mafias binacionales dedicadas al contrabando de extracción de alimentos venezolanos de la cesta básica, y otros rubros de importancia, como el
cemento y combustible; es conocido que los pasos oficiales en frontera, como: San Antonio del Táchira y Boca de Grita fueron cerrados para así combatir el contrabando de extracción ; pero ahora según la inteligencia social estas mafias operan en los pasos ilegales conocidas como "trochas" o "caminos verdes", según nos informan algunos de ellos controlados por las autoridades venezolanas.
Así, tenemos conocimiento de parte de la inteligencia social en el estado andino de Táchira, que en la actualidad hay ciudadanos que semanalmente "pasan" la frontera hacia Colombia y retornan a Venezuela, empleando botes o lanchas que son alquiladas por unos Bs. 1.500 y posteriormente pagan "peaje" a las autoridades. Estas situaciones tienen que abordarse de manera urgente por el Ejecutivo Nacional con la finalidad de combatir y eliminar las mafias que continúan operando en las zonas fronterizas, las cuales han captado a las autoridades para actuar con toda impunidad.
Crisis económica en la frontera golpea fuertemente al ciudadano colombiano
Por otra parte, se tiene conocimiento que la grave crisis económica que padecen los estados fronterizos colombianos, arrojan según un estudio realizado por el DANE, en 13 ciudades de ese país, que la tasa de desempleo se ubicó en 8,8 % en el mes de octubre. Destacando que las ciudades de: Quibdó, Ibagué y Cúcuta encabezan la lista de las urbes colombianas con mayor índice de desempleo.
En el caso de la región cucuteña el índice rodea los 14,1 por ciento, cifra que ha venido en ascenso provocado por diversos factores que se han originado tras el cierre de la frontera colombo-venezolana.
Algunas investigaciones confirman que luego de la medida tomada por el Gobierno venezolano, quedaron al descubierto las serías fallas estructurales que afectan a cerca de 800 mil habitantes que sufren a las desatenciones del Estado colombiano.
Ante la falta de oportunidades, el comercio informal e ilegal en Cúcuta se ha convertido en la principal fuente de ingreso a través del contrabando de alimentos y combustible venezolano.