La Franja de Gaza entra en un invierno duro sin lo suficiente de combustible y con una cosecha dañada por una oleada de frío sin lluvia.
Los más afectados son los niños que están en hospitales con generadores de electricidad a punto de parar.
La crisis aguda de electricidad en la Franja de Gaza y la falta de fondos del Ministerio de Salud están presionando de tal modo que estos niños y niñas podrían quedarse sin cuidados médicos. Podría resultar incluso mortal para los pequeños que están bajo cuidados intensivos.
El hospital Addorra será el primero en sufrir las consecuencias si no se provee de suministro de combustible para los generadores de electricidad. Los cortes de luz diarios se sitúan entre 12 y 16 horas.
Según el Ministerio de Salud en Gaza, la crisis se extenderá al resto de los hospitales de la Franja, en caso de no proveer las cantidades necesarias de combustible.
El intenso frío que azota la Franja de Gaza estos días es un peligro para hospitales y para los campos agrícolas, donde las bajas temperaturas han acabado con gran parte de la cosecha.
Los habitantes de la Franja de Gaza ven como cada invierno bajo bloqueo se hace más duro mientras el suministro de electricidad sigue disminuyendo.