El presidente de Argentina, Alberto Fernández, asumió este miércoles la presidencia pro témpore del Mercado Común del Sur (Mercosur) durante seis meses, un periodo en el que impulsará la incorporación definitiva de Bolivia y la conmemoración del 30 aniversario del nacimiento de un bloque regional que ha estado marcado por vaivenes ideológicos de los Gobiernos de cada uno de los países miembros.
Fernández es el único presidente considerado progresista de un grupo que se completa con los conservadores Jair Bolsonaro, de Brasil; Mario Abdo Benítez, de Paraguay; y Luis Lacalle Pou, de Uruguay. Con estos últimos, el mandatario argentino comenzó a buscar acercamientos en las últimas semanas a fin de limar asperezas para evitar mayores conflictos durante el primer semestre de 2021.
Los cuatro jefes de Estado se reunieron de manera virtual después de las sesiones que el martes mantuvieron sus respectivos cancilleres también de forma remota.
Al asumir la presidencia, Fernández pidió una mayor apertura económica del bloque, sin descuidar a los sectores más vulnerables. El mandatario, que recibió la titularidad de manos de su par uruguayo, Luis Lacalle Pou, manifestó que la pandemia abre una ventana de oportunidades para la región.
“El Mercosur tiene una oportunidad importante, impulsando un comercio agrícola más abierto. Debemos ingresar a los mercados externos. No podemos cerrarnos al mundo de una manera anacrónica”, señaló el presidente Fernández durante su discurso de asunción. Planteó además la necesidad de continuar con las negociaciones para sellar el acuerdo con la Unión Europea y otros mercados.
En este sentido, el jefe de Estado argentino advirtió que la apertura al mundo debe realizarse “sin asumir cargas imposibles de cumplir”.
“Más y mejor Mercosur significa empezar por los últimos, no hay integración social exitosa sin inclusión, no hay una economía robusta con una economía interna desnutrida. Es hora de superar la globalización de la indiferencia y construir la universalización de la solidaridad”, enfatizó el mandatario. Y agregó: “Nadie se salva solo”.
A su vez, Fernández solicitó la incorporación de Bolivia al bloque regional. “Creemos que será un verdadero logro, un hito”.
Entre otras cuestiones, el jefe del Ejecutivo argentino también planteó la necesidad de incrementar los intercambios en tecnología, educación 4.0 y elevar el potencial científico. “El Mercosur abarca el intercambio cultura, políticas migratorias, democracia, equidad racial, promoción de la mujer, lucha contra el crimen organizado, es mucho más que un bloque económico”.
Previamente, intervino el titular saliente de la organización, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou. El mismo reconoció que no se logró “el avance” que hubieran “querido desde un principio”. “Creo que con los elementos que manejamos y con los tiempos hay algunas cosas para destacar y algunos anclajes sobre los cuales nos podemos parar en el futuro”, valoró.
Tanto Lacalle Pou como los presidentes de Paraguay, Mario Abdo; y de Brasil, Jair Bolsonaro; se pronunciaron por una mayor integración regional e internacional. Sin embargo, esa posición no ha encontrado respaldo de esos mismos Gobiernos en el pasado, cerrando las puertas del bloque a Venezuela y Bolivia.