Nuevo informe revela las medidas de represalia que había preparado Irán para responder un posible ataque del gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) contra sus petroleros destinados a Venezuela.
El pasado mes de mayo, Irán envió a Venezuela cinco buques cisterna, cargados con 1,53 millones de barriles de gasolina y aditivos, para paliar la gran escasez de combustible que sufre el país sudamericano a raíz de las sanciones impuestas por EE.UU., en el marco de sus acciones ilegales de presión contra el Gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Todos los petroleros llegaron a Venezuela uno tras otro sin que EE.UU. hiciera nada para evitarlo, pese a haber amenazado con intervenir si la República Islámica entregaba combustible al país suramericano.
Monitoreo a barcos comerciales de EEUU
Un informe publicado el pasado sábado por la agencia de noticias iraní Nour News dio a conocer que la Fuerza Armada del país persa comenzó a monitorear desde mayo los barcos comerciales de EE.UU. que cruzaban el Golfo Pérsico, luego de que Washington amenazara con usar la fuerza para impedir la llegada de los petroleros persas a Venezuela.
“Se emitió una orden para que las fuerzas navales de Irán identifiquen y sigan a varios buques mercantes estadounidenses en el Golfo Pérsico y el Golfo de Omán. Las opciones de acción recíproca fueron identificadas y monitoreadas de inmediato para posibles operaciones”, señala la agencia.
El informe, además, reporta que las autoridades estadounidenses ofrecieron primero un soborno de millones de dólares a los capitanes de estos petroleros para que no lleven a cabo la misión o cambien su ruta a otro destino.
“Luego de que no lograron su objeto con la táctica de soborno, los estadounidenses amenazaron con apoderarse de los petroleros iraníes. Sin embargo, fueron obligados a retirar su amenaza cuando recibieron un mensaje por parte de Irán sobre las represalias contra los buques de EE.UU. en el Golfo Pérsico”, detalla el medio persa.
Respecto a las amenazas de Washington, las autoridades persas han advertido en reiteradas ocasiones que responderán con represalias, si Estados Unidos crea problemas a los petroleros con bandera iraní en aguas internacionales.
Teherán ha dejado en claro que el comercio entre Irán y Venezuela es propio de dos países independientes y, por tanto, este asunto no incumbe a terceros. Esta posición también ha sido defendida por el gobierno venezolano alegando el derecho de ambos países a establecer relaciones comerciales.