Entrevistamos al fundador y alma máter de Wikileaks, Julian Assange, sobre el espionaje masivo de Estados Unidos con ayuda de Google y otras grandes empresas de Silicon Valley. Además nos habla de Snowden, Manning y el futuro de la filtración de secretos.
“Google tiene más influencia que la que ha tenido nunca la Iglesia. Es como un confesionario global que guarda todos nuestros secretos y está conectado con el gobierno de Estados Unidos”. Es Julian Assange quien nos habla al otro lado del teléfono en la primera entrevista que concede a un medio español tras la publicación en España de su último libro, “Cuando Google encontró a Wikileaks” (Clave Intelectual). Desde la embajada de Ecuador en Londres, en la que sigue refugiado después de dos años, el hacktivista que revolucionó el periodismo con la filtración de secretos, nos habla de la estrecha colaboración de Google y las grandes empresas tecnológicas de Silicon Valley con la Administración estadounidense.
Según el fundador de Wikileaks, las herramientas de control y espionaje global a la ciudadanía son cada vez más sofisticadas, pero también las formas de revelar sus prácticas de vigilancia y de protegerse de ellas. “El problema es que la vigilancia es invisible e intangible y la mayoría de la gente no se da cuenta de los riesgos. Para hacérselo ver, estamos los tecnólogos”, nos cuenta Assange, quien está convencido de que las represalias sufridas por él, Manning o Snowden no reducirán la filtración de secretos por parte de los “whitleblowers”: “La persecución que hemos sufrido no nos detiene, al contrario, es una motivación, como se ha visto en el caso de Snowden”, al que por cierto Wikileaks ayudó en su huida, según nos cuenta Assange.
Sobre su organización y su situación personal, se mostró optimista porque están empezando a ganar sus procesos judiciales y han recuperado la financiación después del bloqueo al que fueron sometidos. “Nuestro papel ha sido importante en procesos políticos en todo el mundo. Wikileaks es el rebelde contemporáneo. Estamos recuperando la Historia suprimida del mundo. Es una enciclopedia de cómo funciona la política actual y eso dará lugar a reformas”, concluyó.
Tras la apasionante conversación con el director de Wikileaks, en nuestra Mesa de redacción analizamos la revolución que la revelación de secretos ha supuesto para el periodismo y la democracia. Hablamos de iniciativas como Fíltrala o Buzón X, de la información cifrada y de otras formas de hacktivismo. Nos ayudan a desenrrollar la madeja Juanlu Sánchez, compañero y subdirector de eldiario.es, Yolanda Quintana, periodista y autora de “Ciberactivismo. Las nuevas revoluciones de las multitudes conectadas” y Víctor Sampedro, Catedrático de Opinión Pública y Comunicación Política en la Universidad Rey Juan Carlos y autor, entre otros, de “El cuarto poder en Red”.
De las noticias de la Red a las reality news que llegan desde Ulan Bator de la mano de nuestros compañeros de la revista Mongolia. La visión más ácida y satírica de la realidad una semana más.
Y cerramos este programa dedicado al universo de la información con “malas noticias”: Berri Txarrak, el grupo navarro nos presenta su último disco “Denbora da polígrafo Bakarra” (El tiempo es el único polígrafo), un disco triple con tres estilos diferentes, tres maneras de interpretar el rock por la banda que cumple 20 años sobre los escenarios. Trallazos de hardcore amargo para entender el mundo.