Este martes el mando de la Armada de Estados Unidos presentó un nuevo proyecto destinado a mantener la actuación de la Marina estadounidense por delante de la de Rusia y China, sus principales competidores en este ámbito, informa 'The National Interest'.
Estados Unidos admite que el ambiente estratégico en alta mar ha cambiado mucho en los últimos años: ahora su Armada se enfrenta con desafíos por parte de los rusos y los chinos. Por lo tanto, el país tiene que avanzar para mantener su ventaja.
Para lograr este fin, según explica el almirante John Richardson, jefe de operaciones navales, el nuevo proyecto identifica cuatro líneas principales en las que se planea trabajar: fortalecer la potencia naval en el mar y la actuación desde el mar, lograr una alta velocidad de aprendizaje a todos los niveles, consolidar el equipo de la Marina para el futuro, y ampliar y reforzar la red de socios.
"Rusia y China han avanzado en desarrollar su poder militar para actuar como potencias mundiales. Sus objetivos están respaldados por un creciente arsenal de capacidades de combate de alta gama, muchas de las cuales se centran especialmente en nuestras vulnerabilidades", comentó Richardson. Para contrarrestar estas fuerzas, la Armada de EE.UU. planea mejorar el entrenamiento, la coordinación entre sus bases, y colaborar con otras fuerzas, organismos e industrias estadounidenses.
