Aviso

 

El actual Rector de la Universidad de Córdoba le está vendiendo a la opinión pública del departamento el cuento de que él es un gran defensor de la educación superior regional y de los recursos correspondientes. Pero quiere esconder el contratismo desenfrenado en esa institución en varios temas como la contratación del transporte escolar, la vinculación de catedráticos y otras contrataciones fraudulentas como la que se ha entregado a dedo al Presidente de Aspu, el señor Fabio Gomez, quien se ha favorecido de contratos trimestrales cercanos a los 650 millones de pesos otorgados a José Maria Gomez Barguil, hijo del anterior para temas relacionados con obras civiles en la Universidad de Córdoba.

Torres Oviedo pretende perpetuarse hasta el 2030 en la Universidad mediante un sistema de cooptación y compra de delegados y votos estudiantiles.

Tal como lo señala un importante directivo de esa Universidad en la sucursal de Lorica, Jairo Torres Oviedo, como muchos intelectuales y académicos fue crítico acérrimo de Uribe por haber modificado nuestra constitución, para lograr su reelección inmediata y tratar de perpetuarse en el poder.

Tenían razón la reelección acaba con los pesos y contrapesos de nuestra débil democracia.

El señor JAIRO TORRES OVIEDO, rector de la Universidad de Córdoba, todo un demócrata de avanzada abanderado de La Paz en el gobierno Santos que con «su iniciativa Paz Córdoba» le permitió recorrer el país y el extranjero con su novedosa propuesta.

Hoy en el gobierno Duque-Uribe, como que no es políticamente correcto ni da réditos o no pudo prorrogar su plan de Paz, si ha logrado  al mejor estilo uribista prorrogar su propio periodo como Rector en forma continua, algo inédito en la historia del Alma Mater cordobesa.

Jairo Torres, fue designado como rector mediante convocatoria pública,  para un periodo de (3) años del 18 de diciembre 2015 al 18 de diciembre de 2018, pero se dio cuenta que para él, un periodo de (3) años era muy poco tiempo, entonces logró que el Consejo Superior a través del Acuerdo 106 de 2017, le prorrogara su periodo de (3) a (4) años, que finalizaría el 18 de diciembre de 2019, pero se volvió a dar cuenta que el tiempo pasa muy rápido cuando uno está en el poder y que cuatro (4) años no le eran suficientes, entonces logró nuevamente que el Consejo Superior mediante el Acuerdo 270 de 2017 le volviera a prorrogar su periodo de (4) a (5) años, finalizando así el 18 de diciembre de 2020, pero como (5) años continuos tampoco le son suficiente, está tratando de lograr que el Consejo Superior lo reelija por  (5) años más, con el argumento de: que sin él no es posible el proceso de acreditación. ¡Hágame el favor!

De allí que estamos ad-portas de tener un Rector que no sabemos después de tantas prórrogas cuando termine su periodo, posiblemente el «18 de diciembre de 2030, si es que no logra su reelección indefinida.

Periodos rectorales de (10) años marchitan la autonomía universitaria, cierran los espacios democráticos y revisten de poderes absolutos al Rector, que como ordenador del gasto puede atornillarse en el cargo, tal como lo está haciendo con todo descaro abusando de su cargo directivo en los actuales momentos para lo cual armo una alianza con la senadora ultraderechista del uribismo Ruby Chagüí, heredera y socia de la parapolítica.

Las trampas y abusos del Rector Torres Oviedo están deteriorando a grandes velocidades la situación de la Universidad de Córdoba, a tal punto que hoy los estudiantes debieron cerrar las puertas de ingreso para denunciar las detenciones de estudiantes. En efecto estudiantes de la Universidad continúan protestando en la institución por la captura ayer miércoles 16 de octubre de cinco presuntos expendedores de sustancias alucinógenas, uno de ellos el reconocido vendedor de golosinas y estudiante de la Universidad de Córdoba, el popular Chocobreak, cuyo nombre de pila es Gustavo Salgado.

Hoy no permiten el ingreso de personal por la puerta principal de la universidad y han sacado las sillas de los salones como forma de protesta pidiendo la liberación de los mismos.

En horas de la tarde se realizará la audiencia de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento en el Palacio de Justicia de Montería.

Nota. Graves los conflictos en la Universidad Tecnológica de Pereira. Este es el comunicado de Aspu sobre la coyuntura universitaria en Pereira.

 

COMUNICADO A LA COMUNIDAD UNIVERSITARIA Y A LA OPINIÓN PÚBLICA ANTE LOS HECHOS DEL MARTES 15 DE OCTUBRE DE 2019

Ante los hechos acaecidos el día 15 de octubre en las horas de la tarde, en los alrededores de la Universidad Tecnológica de Pereira, nos permitimos hacer unas consideraciones públicas a toda la comunidad universitaria:

 1. El estudiantado de la Universidad Tecnológica de Pereira se ha caracterizado por hacer uso de la protesta legítima, creativa y pacífica, tal como la ciudadanía lo atestiguó durante el paro nacional universitario de 2018. Las directivas de la Universidad como el profesorado aglutinado en ASPU, reconocieron en ese momento la justicia de las peticiones del movimiento estudiantil nacional, en la medida que de su conquista dependía, que más jóvenes pudiesen hacer uso del derecho a la educación superior en Risaralda y Colombia. No podemos olvidar que existe una deuda del Estado con la educación de los jóvenes.

2. Es pertinente recordar que desde los años  2013 y 2015 dentro y fuera de la UTP no se presentaban situaciones de fuerza como las recientemente registradas. Por lo anterior resulta apresurado señalar y estigmatizar a líderes y al propio movimiento estudiantil de ser los responsables de la alteración del orden público, en este escenario son muchos los factores y actores que entran en juego, condenar y poner en riesgo la vida de personas al estigmatizarlos, es un acto de irresponsabilidad tanto de los medios de comunicación como del gobierno.  Lo grave de estas situaciones es que generalmente degeneran en allanamientos, detenciones que violentan derechos y garantías constitucionales, además de  amenazas por parte de grupos al margen de la Ley.

 3. La Universidad Pública también es impactada por diferentes violencias que vive la sociedad y los estudiantes en su cotidianidad, son golpeados permanentemente por violencias estructurales, como: la corrupción, la violencia de género, la exclusión étnica, entre otras; de allí que hoy más que nunca, la universidad es un laboratorio para la búsqueda de alternativas de muchas de las causas de la injusticia.

4. Es posible que los incidentes recientes se enmarquen dentro de una serie de circunstancias por las que atraviesa el país en los últimos meses, producto de la “crisis” en que se encuentran los Acuerdos de Paz, los riesgos de la llamada “polarización”, la presencia de grupos interesados en avivar el desconcierto y la confusión entre la sociedad civil.

5.  Nos preguntamos por qué ante hechos como los acaecidos el 15 de octubre, hay un despliegue mediático y un señalamiento incisivo por diferentes estamentos y sectores sociales a los estudiantes de la UTP.  No entendemos por qué no hay un despliegue cuando el movimiento estudiantil hace manifestaciones pacíficas reivindicando sus derechos.

6.  Somos defensores de la vida y por lo tanto rechazamos de manera enérgica la persecución, los allanamientos y la sindicación de los líderes estudiantiles como terroristas, al igual que la criminalización de la protesta social, por eso instamos a todas las partes involucradas a la sensatez.  Igualmente abogamos para que el diálogo, la deliberación y la argumentación prolifere entre cada uno de quienes hacemos parte de la comunidad UTP, donde pese a las dificultades por las que atravesamos trabajamos y luchamos por una sociedad mejor.

7. Por último invitamos a toda la comunidad universitaria a que asumamos las acciones que realicemos de manera meditada, consciente. La euforia colectiva no debería ser el motor  principal cuando se lucha por un propósito justo.

ASPU-UTP